El rol y misión de la Iglesia, es predicar y anunciar el reino de los cielos. Esta predicación y anuncio no solo se hace a través de las palabras; sino que se muestra a través de las acciones.

Unos 700 años antes de que Jesús naciera y a través  del profeta Isaías el Señor nos dejaba estas palabras "¿No es más bien el ayuno que yo escogí.....que partas tu pan  con el hambriento, a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo lo cubras, y no te escondas de tu hermano?".  En tiempos donde la mayoría de los individuos, no ven las necesidades de quienes le rodean, y viven egoístamente pensando solo en la satisfacción de sus necesidades personales, las palabras inspiradas al profeta resuenan en nuestra mente y nuestro corazón. 

No  descuidando la máxima prioritaria, que es la predicación del Evangelio, nuestra Misión mira a su alrededor y  trata en la  medida de su posibilidad, realizar la tarea que le corresponde a través de cada una de las congregaciones locales.

En este objetivo y tarea, se encuentran los "Costureros" que reciben en donación ropa de medio uso y la reciclan, ofreciéndola a precios muy por debajo de los valores de mercado. En aquellos casos en que la persona no puede acceder a estos precios mínimos, se le donan las prendas, tratando siempre de ver que tengan un buen fin. Quizás alguien pregunte: -¿Y por que no darlo todo en donación?; la respuesta es simple. Muchas veces lo que se recibe sin ningún esfuerzo, no se valora. Y cuando la persona, teniendo algún medio, espera solo recibir, pierde algo de su dignidad. Como seguramente alguna vez escuchó " No hay nadie tan pobre que no tenga nada para dar, y no hay nadie tan rico que no tenga nada que recibir".

Se realizan múltiples tareas, desde acompañar, cuidar e higienizar al paciente durante su internación, en sus visitas al médico cuando no hay nadie de la familia que lo pueda hacer, hasta lavado de ropa y limpieza del hogar cuando fuere necesario.

Para personas que o han perdido sus trabajos, o que se encuentran atravesando situaciones particularmente difíciles. De modo transitorio, y con la máxima bíblica de "...sino para que en este tiempo,  con igualdad,  la abundancia vuestra supla la escasez de ellos,  para que también la abundancia de ellos supla la necesidad vuestra,  para que haya igualdad..." 2Corintios 8:14

Personas que, o se sientes solos o lo están realmente, y para quienes el tiempo compartido es de un valor inestimable.

Como sal y luz, debemos estar insertos en nuestra sociedad, realizando allí la tarea de ser exactamente lo que debe ser un hijo de Dios. Sal en un mundo insípido y corrupto y luz en medio de las tinieblas.

Comisiones Escolares, Barriales y de luchas contra flagelos de la sociedad, son el lugar natural para que la Iglesia cumpla su rol y función. Interviniendo con cordura y aportando la calma y paz que necesita un mundo convulsionado.

Proporcionando el necesario esparcimiento, así como también implantando sólidos valores espirituales, sociales y morales a fin de brindar las herramientas de desarrollo personal, tan necesarias en este tiempo.

Nuestra Misión atiende mas de 350 niños, que residen en áreas urbanas, suburbanas y rurales; brindando en muchos casos merienda, desayuno y hasta almuerzos en donde es necesario. Todo esto sin ningún tipo de ayuda oficial o estatal.

Música instrumental y vocal, Cocina, Electrónica, Costura, Ingles, son solo algunos de los cursos que se han dictado o están dictándose. Los costos son mínimos, apenas los necesarios para cubrir los propios gastos que ellos demandan.

Realizando eventos con fines solidarios y cuyos beneficiarios sean instituciones de reconocido aporte a la comunidad, como hospitales, hogares de ancianos etc.

Algunas veces se nos pregunta o reclama el porqué los principales beneficiaros (aunque no los únicos) son los integrantes de nuestra comunidad. Para ellos, los que critican sin hacer, o hacen para ser vistos, como única respuesta les citaremos la escritura: